¿Sabías que la tartiflette es uno de los platos más emblemáticos de la cocina de la región francesa de Saboya?
Es una invención bastante reciente, de los años 80, para promocionar el consumo del queso reblochon. ¡Y dieron en el clavo! La campaña publicitaria hizo que el plato se reprodujese en hogares y restaurantes franceses.
!Para elaborar una tartiflette original, tenemos que usar como ingrediente indispensable el queso reblochon, pero también se puede customizar y utilizar otro tipo de queso de pasta blanda y corteza enmohecida. Muchos de ellos, y también el reblochon, lo encontrarás en MAS Food Lovers.
Pelar las patatas y cortarlas en rodajas de 1 centímetro de grosor. Colocarlas dentro de una olla y cubrirlas con agua, añadir un poco de sal y llevarlas a ebullición. Dejar que cuezan 10 minutos a fuego medio. Escurrir y reservar.
Cortar el bacon en tiras y dorarlo en una sartén. Cuando empiecen a dorarse, escurrirlo y retirar el exceso de grasa. Pelar las cebollas, cortarlas en juliana y añadirlas a la sartén. Rehogar la cebolla con la panceta unos 10 minutos, hasta que la cebolla esté tierna. En ese momento, añadir el vino y cocer hasta que se evapore.
Untar la base de una fuente para horno con un par de cucharadas de crème fraiche. Colocar una capa de patatas y salpimentar.
Ahora poner encima de las patatas la panceta con la cebolla.
Terminar de colocar el resto de patatas, volver a condimentar con pimienta y un par de cucharadas más de crème fraiche.
Por último, raspar un poco la corteza del queso reblochon para quitarle la capilla blanca. Aunque es comestible, sin ella mejora el gratinado. Cortar el queso reblochon por la mitad y cada mitad la cortamos a lo largo. Colocarlo sobre las patatas con la corteza hacia arriba.
Hornear a 180 ºC de 20 a 30 minutos, hasta que el queso esté derretido y su corteza ligeramente dorada. Dejar reposar 10 minutos.
